La parte destinada a Turismo Rural, la cual forma parte de la estructura de la casa, era la antigua casa de los "masovers" ó cuidadores de la finca.
El alojamiento tiene tres habitaciones. Dos de dobles y una individual, todas tienen calefacción y comparten un baño.
En la planta baja, encontramos la cocina, el comedor, la sala de estar, con televisión, chimenea, y un baño.
Dispone de una piscina, barbacoa, garaje y un jardín de más de 750 m2.
Can Caballé está situado en un lugar ideal como centro de excursiones.